Mirar un aborto o sus restos puede ser muy doloroso, pero es la única manera de saber de qué estamos hablando cuando discutimos sobre el aborto.
Si algo es muy duro de mirar, posiblemente no deberíamos permitir que pase en la realidad.
11.21.2006
Dura realidad
Muy duro, pero no más duro que la realidad: son imágenes reales.
Carta del niño abortado
Leída en primera persona, cuenta lo que le pasó... Dura.